La Cátedra Cerámica de UIC Barcelona School of Architecture continúa su intensa programación durante este mes de noviembre. El pasado día 8, los catorce alumnos del presente curso se trasladaron hasta la localidad barcelonesa de Sant Just Desvern para visitar el Taller de Arquitectura de Ricardo Bofill, con sede en una antigua fábrica de cemento reconvertida en los años 70, y también el célebre edificio Walden 7.

Los alumnos estuvieron acompañados por el director de la Cátedra, el profesor Vicenç Sarrablo, por los también profesores Jordi Roviras y Cristina Garcia Castelao y por el arquitecto Hernán Cortés, que forma parte del equipo profesional de Ricardo Bofill y que fue alumno de la primera edición de la Cátedra Cerámica en el curso 2004-2005. Además de los despachos, ubicados en los antiguos silos de la factoría, los estudiantes pudieron disfrutar de un recorrido que incluyó la visita a los talleres de maquetas, archivos, “La Catedral” (el espacio expositivo del Taller) y los jardines que la rodean. 

 “Hemos tenido mucha suerte de tener a un exalumno de la Cátedra Cerámica tan entusiasta como Hernán Cortés para que nos abriera las puertas de un estudio de arquitectura tan especial como el de Ricardo Bofill. Sus explicaciones de cómo funciona el estudio y de las obras que están acometiendo cautivó y fascinó a los alumnos que, por unos momentos, pudieron vivir por dentro cómo se trabaja en un despacho de arquitectura de esas características”, afirma el profesor Vicenç Sarrablo.

Tras visitar el taller de Ricardo Bofill, los alumnos se trasladaron hasta el edificio Walden 7, una de las obras más emblemáticas de la arquitectura catalana de los años 70, proyectada por el propio Ricardo Bofill en base al uso de materiales cerámicos.