Su propuesta, presentada con el lema “Árboles, libros, niebla y recuerdo”, ha sido elegida por el jurado del concurso que convocó el Ayuntamiento de Vic, al que se presentaron inicialmente 56 propuestas.

El proyecto propone un edificio que se despliega en un jardín abierto a la ciudad, con volúmenes que se articulan y se disponen para crear espacios diferenciados dentro de la nueva biblioteca, y con la especial voluntad de integración con su entorno urbano más inmediato.

Los ciudadanos verán un nuevo jardín y una biblioteca abierta, cuya actividad interior será perfectamente visible desde la calle.

La propuesta plantea también que el jardín, aparte de ser un espacio de relajación y descanso para los usuarios de la biblioteca, sea un jardín de memoria, un espacio conmemorativo con diez grandes árboles que recuerden cada una de las víctimas del atentado del año 1991.

La primera piedra del nuevo edificio se colocará a finales de 2018