El jurado, presidido por el prestigioso arquitecto Manuel Gallego, «ha valorado la solución arquitectónica de insertar un nuevo interior en un edificio existente, con una solución de vivienda elegante y sencilla. La calidad del ambiente se consigue a través de la utilización muy precisa y coherente de la cerámica, que le otorga calidez. La integración se logra mediante texturas y sistemas constructivos que establecen continuidad con la arquitectura preexistente».

Aitor Fuentes valora positivamente el premio por la situación actual del estudio. «La obra premiada es la primera vivienda unifamiliar que construimos, y en este momento, en el que tenemos más proyectos similares en marcha, este premio nos da mucha fuerza para seguir adelante». De la misma manera los cuatro Alumni valoran su paso por la Cátedra Cerámica como alumnos de la ESARQ-UIC. «Por un lado, nos ha servido para entender los procesos de fabricación de las distintas piezas cerámicas, para así poder diseñar teniendo constantemente presentes los procesos industriales. Fue nuestro primer contacto con el diseño industrial y actualmente desde el estudio llevamos una pequeña editora de mobiliario llamada Indoors que no deja de estar en contacto con ese mundo. Por el otro, nos ha servido para conocer mejor y apreciar el material, que no hemos dudado en utilizar en la «Casa Luz».

El Premio de Cerámica está promovido por la Asociación de Española de Fabricantes de Azulejos y Pavimentos Cerámicos (ASCER) y ha premiado en las últimas doce ediciones obras españolas que han hecho un buen uso de pavimentos o revestimientos cerámicos fabricados en España, reconociendo obras como el Pabellón de España de la Expo de Zaragoza, de Patxi Mangado; el paseo de Poniente de Benidorm, de Carlos Ferrater y Xavier Martí, o el Mercado de Santa Caterina, de Enric Miralles.