El pasado 8 de septiembre, la subdirectora de Relaciones Internacionales de UIC Bacelona School of Architecture, Carmen Mendoza-Arroyo, intervino en la sesión de debate “Duty of care in the context of displacement: reflections on ways of working in Lesbos”, organizada por Future School, el pabellón de Corea de la 17.ª edición de la Bienal de Arquitectura de Venecia. La sesión estuvo comisariada por la exalumna del Máster en Cooperación Internacional, Arquitectura Sostenible de Emergencia, Shareen Elnaschie, cofundadora, a su vez, de la organización Office of Displaced Designers. 

En su intervención, Carmen Mendoza-Arroyo defendió la necesidad de implementar un nuevo modelo de acogida de refugiados mediante la puesta en marcha de políticas de vivienda permanente y a largo plazo. “Aunque las autoridades locales, las ONG, la sociedad civil, los urbanistas y muchas partes interesadas están trabajando en soluciones de alojamiento de emergencia para refugiados (refugios temporales, campamentos de recepción, etc.) urge un cambio hacia un nuevo modelo de vivienda permanente que permita la construcción de una comunidad a largo plazo y favorezca, asimismo, una inclusión social significativa de estas personas”, afirmó. 

Siguiendo su línea de investigación en UIC Barcelona, Carmen Mendoza-Arroyo incidió, también, en la necesidad de abordar aquellos indicadores espaciales que puedan favorecer la integración de refugiados a largo plazo. “Los contextos urbanos se han convertido en los lugares más adecuados para cuestionar los espacios de y para los inmigrantes en las ciudades europeas. Los programas de vivienda deberían incluir sistemas de asignación de apartamentos, la participación de estas personas en planes de financiación de sus viviendas, derechos de los inquilinos y políticas de protección contra la discriminación”, defendió.  

La sesión de debate tenía por objetivo analizar de qué manera los arquitectos, urbanistas, diseñadores e ingenieros pueden contribuir a la integración de los refugiados en Europa tomando como referencia la respuesta europea a la crisis de los refugiados de 2015 en Lesbos.