24/02/2016

David Odalric explica en UIC Barcelona las amenazas del Estado Islámico y la política internacional para combatirlo

En una nueva ponencia en la Facultad de Derecho, los alumnos pudieron conocer de manos de un experto la situación en Oriente Medio.

El profesor David Odalric de Caixal i Mata, historiador militar, analista en geoestrategia internacional y terrorismo yihadista y, además, director general en España de SECINDEF (Security, Intelligence & Defense) Israel International Consulting, estuvo en UIC Barcelona para explicar a los estudiantes de Derecho la estrategia global que se está llevando a cabo para combatir al Estado Islámico. 

Antes de empezar a hablar de movimientos de defensa internacional, David Odalric quiso contextualizar. Para hacerlo, explicó el funcionamiento interno del Estado Islámico y situó en el mapa al grupo islamista radical. El Estado Islámico es una organización sunita, su líder es Al-Baghdadi y pretende construir un califato comprendido, de norte a sud, entre los Pirineos y la frontera sud de Kenia y, de este a oeste, entre Pakistán y Finisterre. La bandera del Estado Islámico, que es una de las que hizo ondear Mahoma, debería regir estos territorios en un plazo de cinco años.

Para luchar contra el Estado Islámico hace falta combinar ataques aéreos y terrestres. 

Un grupo que se dispersa para evitar los bombardeos no tiene tiempo de organizarse para hacer frente a los combates sobre el terreno. De acuerdo con David Olradic, “Probablemente, el mejor ejemplo de este fenómeno lo encontramos en la Guerra del Golfo de 1991”. 

Estados Unidos lidera una coalición internacional en la lucha contra el grupo islamista. La alianza está formada por cuarenta países, algunos de los cuales, como España o Rusia, se limitan a enviar armas y asesores militares a los kurdos e iraquís que combaten contra el Estado Islámico. 

La geopolítica contemporánea en Oriente Medio es muy confusa. Para poner un ejemplo: Estados Unidos combate en Siria contra Irán, apoya a Irán en la lucha contra el Estado Islámico, ha negociado con Irán en Suiza a raíz del programa nuclear y combate contra Yemen, hecho que refuerza a Arabia Saudí, el principal país que promueve el terrorismo. 

La estrategia militar del Estado Islámico es magnífica. Además, hace falta tener en cuenta que la organización armada se alimenta de un cóctel que la hace muy poderosa: sentimientos antioccidentales muy arraigados, odio a los musulmanes chiíes y debilidad de los estados que la rodean. Ahora mismo, abundan los rumores que apuntan a la creación de hasta cinco nuevas tierras de nadie. 

Estados Unidos y Rusia han seguido estrategias secretas totalmente opuestas. Los norteamericanos apostaron por dejar hacer al Estado Islámico en sus ofensivas contra el ejército sirio, fiel a Bashar Al-Asad. La prensa llegó a publicar, incluso, que Estados Unidos hacía llegar armas a los radicales. La estrategia fracasó. El general Allen, después de un escándalo mediático y de la llegada en escena de Rusia, fue cesado como director de la coalición internacional. 

Rusia ha actuado más tarde y de una manera muy diferente. Los soviéticos se han posicionado al lado de Al-Asad y bombardean las fuerzas del Estado Islámico cada vez que entran en contacto con el ejército sirio. La prioridad rusa es derrotar a los yihadistas antes de que ocupen el Cáucaso ruso. 

David Odalric hizo referencia también a los vídeos publicitarios del Estado Islámico. Explicó que los distribuye una empresa norteamericana y se preguntó por qué en Occidente se siguen emitiendo. Para responder, aportó una declaración de un líder del ISIS: “Hemos sido financiados por el gobierno de Obama, entre otros”. 

El profesor acabó la conferencia con un apunte de actualidad: los terroristas intentan llegar ahora a Europa como refugiados de guerra. El nuevo foco de entrada será los Balcanes que, según la CIA, serán completamente musulmanes en el año 2025. Aún en clave de actualidad, Odalric destacó que el próximo objetivo del Estado Islámico es Libia.