Joan Hernández, director del Grupo de Trabajo Estable de Religiones (GTER) y profesor de la Facultad de Humanidades, participó la semana pasada como organizador y ponente en el V Encuentro Interreligioso Iberoamericano que, bajo el tema “Líderes religiosos y jóvenes en la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible dedicados a la juventud, el emprendimiento y la educación”, tuvo lugar en Colombia, como evento previo a la XXV Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno. El Encuentro tiene como objetivo aportar recomendaciones sobre los temas a abordar en la Cumbre Iberoamericana desde las perspectivas específicas de las comunidades de fe.
Estaba organizado por el Consejo Latinoamericano y Caribeño de Líderes Religiosos-Religiones por la Paz, que reúne a las principales comunidades religiosas de la región, y el Grupo de Trabajo Estable de Religiones (GTER), red de confesiones religiosas de Catalunya con interacción en todo el Estado español. Contó con la cooperación de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB) y el Consejo Interreligioso de Colombia, la participación del Ministerio del Interior de Colombia y el apoyo de la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI).
El profesor Hernández participó en la segunda sesión del 26 de septiembre, que trató de “La mirada de los jóvenes sobre la pobreza y las desigualdades”. La moderó elreverendo Daniel Rodríguez, presidente de la Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España (FEREDE), y le acompañaron Ángel Montes, miembro del Equipo Latinoamericano de Pastoral Juvenil del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) y miembro del Equipo Ejecutivo de la Red Juvenil de América Latina y el Caribe de Religiones por la Paz; Daniel Vega, representante de la Red de Juventudes Interreligiosas de Bogotá, y David Turizo, asesor de la Dirección del Sistema Nacional de Juventud de Colombia “Colombia Joven”.
En sus conclusiones, y después de tres días de trabajo, el V Encuentro Interreligioso Iberoamericano propuso a las comunidades de fe: crear y fortalecer las redes de juventudes interreligiosas, para que emprendan acciones concretas; a los jóvenes religiosos, continuar participando activamente en los próximos encuentros y el seguimiento de los compromisos acordados, y finalmente, a los jefes de Estado y de Gobierno, que se reunirán en la XXV Cumbre Iberoamericana, queconsideren las preocupaciones comunes y compartidas sobre la juventud en el espacio iberoamericano.
Este V Encuentro Interreligioso Iberoamericano coincidió con la firma del Acuerdo Final de Paz, para alcanzar una paz con justicia, verdad, reparación y no repetición. Los participantes rezaron para que ese esfuerzo en favor de las víctimas y de la reconciliación, se convierta en una realidad entre todos los colombianos.
