Los profesores del Área de Proyectos de UIC Barcelona School of Architecture Jaime Batlle e Iñaki Baquero han calificado de “muy buena noticia” el proyecto presentado por el Ayuntamiento de Barcelona para convertir el Eixample de Barcelona en una gran supermanzana y han defendido la capacidad del modelo ideado por Ildefons Cerdà “para evolucionar más allá de la nostalgia”.

Iñaki Baquero señala que las supermanzanas son un modelo de éxito en muchos lugares donde ya se han implantado, como los barrios de Gràcia y el Born o la ciudad de Vitoria. Pese a todo, considera que la medida es insuficiente para frenar la contaminación y, en este sentido, apunta a la necesidad de llevar a cabo una actuación a nivel general, de infraestructuras, pero también a nivel particular: “Tenemos que interiorizar que el coche privado no es un derecho, sino un privilegio”. 

En la misma línea, el profesor Jaime Batlle ha celebrado que el Ayuntamiento de Barcelona haya aprovechado la COVID-19 para “implementar algunos procesos de transformación” en la ciudad, como “las supermanzanas, carriles bici, líneas de transporte público, que hasta ahora parecían imposibles”, y ha pedido “responsabilidad a todos” para “no utilizar esta transformación políticamente por ninguna de las partes”. También se ha referido al papel de la ciudadanía en la transformación de la ciudad y ha asegurado que esta “debe exigir sus derechos sobre el uso y disfrute del espacio público y, al mismo tiempo, responsabilizarse, implicarse y sacrificarse por el bien común”. 

Ambos profesores elogian que, con medidas como esta, “el mundo vuelva a mirar a lo que hace Barcelona”, tras el impacto internacional del anuncio realizado por el Ayuntamiento. “Solo eso ya es un pequeño logro”, ha concluido.