Un estudio realizado por UIC Barcelona en colaboración con la Universitat Pompeu Fabra y el IRB Barcelona señala que, con este mecanismo, las células pueden adaptarse a los cambios ambientales con seguridad y sin cometer errores
Un estudio publicado recientemente en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences of the United States of America (PNAS), en el que ha participado el Dr. Javier Jiménez, profesor y miembro del Grupo de Investigación en Nuevas Ciclinas, muestra un nuevo mecanismo molecular que detiene la división celular cuando acontece una situación de estrés ambiental. De este modo, las células tienen tiempo para adaptarse a la nueva situación y a prepararse para continuar su proceso de multiplicación con seguridad y libre de cometer errores.
Concretamente, el trabajo titulado “
Hog1 activation delays mitotic exit via phosphorylation of Net1” se centra en cómo la proteína quinasa Hog1 retiene la fosfatasa Cdc14 en el núcleo de las células en situaciones de estrés y evita la progresión de la división celular. “Gracias a este nuevo mecanismo, las células continúan con su proceso de división solo cuando pueden hacerlo correctamente evitando que se produzcan células con alteraciones genéticas y, por tanto, susceptibles de tener un comportamiento inadecuado”, explica Javier Jiménez, uno de los autores principales del estudio.
En palabras del Dr. Jiménez: “Aunque es conocido que el ciclo celular se regula por estímulos externos, el interés de nuestro estudio radica en la novedad del mecanismo que se describe, que afecta al sistema central de regulación del ciclo celular”. Este conocimiento es esencial para entender cómo las células responden a fármacos y sustancias tóxicas, entre otros aspectos, y permite entender un poco más la biología del cáncer y dar un paso más hacia su curación.