El 16 de junio, los alumnos de cuarto curso del grado en Fisioterapia celebraron el solemne acto de graduación en el Aula Magna del Campus Barcelona, presidido por el rector de UIC Barcelona, el Dr. Alfonso Méndiz. Josep Maria Argimon, antiguo consejero de Salud de la Generalitat de Catalunya, fue el encargado de apadrinar la undécima promoción del grado en Fisioterapia.
Argimon, consejero de Salud del Gobierno catalán durante el periodo 2021 y 2022, destacó desde su experiencia la importancia de la vocación y del servicio a los demás en el mundo de la salud. “Vosotros estaréis trabajando siempre por el servicio de las personas —dijo Argimon—, tenéis una función muy importante en la promoción de la salud y la prevención de la enfermedad y la discapacidad. Y no olvidéis que, como profesionales de la salud, tenéis que actualizar constantemente vuestros conocimientos para ofrecer siempre el mejor servicio”.
La ceremonia continuó con la imposición de becas y la entrega de diplomas a los graduados, seguida de las palabras que dedicaron los representantes de los estudiantes del grado en Fisioterapia, Daniel Zegarra, Simon Cedeño y Cloé Vachon, a sus familiares, amigos y profesores, agradeciendo el apoyo recibido durante los años de carrera. Además, el profesor Carlos López de Celis, escogido por los alumnos como padrino, dedicó unas emotivas palabras a los nuevos compañeros de profesión en las que destacó el esfuerzo realizado durante el grado y los animó a disfrutar mucho de la profesión.
Por su parte, el director del departamento de Fisioterapia, Daniel Romero, se dirigió a los nuevos graduados y graduadas poniendo especial énfasis en el proceso de innovación tecnológica que se está produciendo actualmente. Destacó la importancia de incorporar la tecnología en un grado como el de Fisioterapia y, en concreto, la combinación entre el metaverso y esta disciplina de la salud.
A continuación, el Dr. Alfonso Méndiz, rector de UIC Barcelona, vinculó su discurso con el mensaje del padrino, reflexionando sobre el sentido del trabajo. “No tenéis que perder nunca el sentido de vuestro trabajo, trabajaréis por la atención de quienes sufren, por el bienestar de los pacientes y la mejora de la calidad de vida. Tenemos que recuperar el valor del acompañamiento, de la comprensión y de la solidaridad”, dijo el rector. Haciendo referencia también a la tecnología quiso comparar el desarrollo de los alumnos en una universidad como UIC Barcelona con el de las nuevas tecnologías e inteligencias artificiales. “En un mundo lleno de tecnología tenemos que redescubrir el valor del diálogo, de la capacidad de escuchar y de la humanidad. Solo así empezaréis una revolución basada en la persona y el afecto”, expuso el rector.
