24/02/2023

La profesora Marta Narberhaus cree que se debe informar a los niños de la guerra en Ucrania porque les preocupa

La profesora de la Facultad de Ciencias de la Comunicación Marta Narberhaus señala la importancia de que niños y niñas estén informados sobre temas de actualidad como la guerra en Ucrania, ya que inevitablemente están expuestos a esas noticias y a las conversaciones de los adultos.

Cuando se cumple un año del inicio de la guerra, la experta ha remarcado que “es un tema que les preocupa porque piensan en si nos puede afectar a nosotros y perciben la preocupación de los adultos”.

Narberhaus ha asegurado que el hecho de estar informados con un lenguaje y con las características determinadas que tienen los informativos televisivos infantiles permite que los niños y niñas entiendan sus preocupaciones y puedan tener respuestas. En su opinión, “a veces, consideramos que son problemas de adultos y que a los niños no les interesan, pero la actualidad les interesa mucho más de lo que pensamos”.

La doctora en Comunicación ha apuntado que cuando no existen informativos específicos los niños y niñas se acostumbran a informar según los hábitos de costumbre informativa de las familias. “Curiosean diarios, si hay, escuchan la radio, aunque sea de forma pasiva... Es decir, están expuestos también a las noticias ‘para adultos’”, ha asegurado. Por ello, ha apostado por que “desde las escuelas y desde las familias se integre el periodismo en su día a día y se piense en información que sea adecuada para su edad”.

Narberhaus realizó un estudio que tenía en cuenta el tratamiento de la invasión rusa de Ucrania en los informativos televisivos infantiles del InfoK, de Televisió de Catalunya, Newsround, de la BBC, y la alemana Logo, de ZDF. Según la profesora, estos espacios aprovechan para hacer “una promoción de valores, de derechos humanos, de la paz, a la vez que hablan del conflicto, pero de una forma muy respetuosa”. “No vemos heridos, ni muertos y son imágenes menos duras y, en algunos casos, las entrevistas las realizan los propios niños y niñas”, ha añadido.

La profesora apunta que los informativos infantiles televisivos trasladan la actualidad con temas que son de trato delicado. “Usan un lenguaje inteligible, incluyen mucho contexto, los protagonistas son los niños y niñas, tienen mucho cuidado en utilizar las imágenes adecuadas e incluso vinculan esas imágenes al mundo infantil, intentando que el imaginario infantil esté presente. Por ejemplo, aparece un parque, un tobogán, unos columpios, rodeado de ruinas…”. También se utilizan muchas infografías o mapas de situación, además de recomendaciones en caso de que las noticias hagan sentir mal.

 

Herramientas para que los niños y niñas se construyan como ciudadanos críticos

Narberhaus ha explicado que los informativos televisivos infantiles son caros de producir en comparación con otros productos audiovisuales dedicados al público infantil y, por ese motivo, hay pocos y son casi siempre de televisiones públicas. En el caso de España ejemplifica que solo existe el InfoK con estas características. “La televisión infantil normalmente emite series de dibujos, series animadas, ficción, porque son productos que se pueden aprovechar más de una vez, mientras que los informativos quedan obsoletos”, ha señalado. La experta considera que el derecho a la información está establecido para todas las personas, “también para los niños y niñas, que tienen que tener sus ventanas al mundo para informarse como ciudadanos que son”.

Considera que habría que intentar conservar estos espacios, que “han sufrido recortes”. En este sentido, ha lamentado que “el público infantil no es ni será nunca prioritario, pero tenemos que pensar que los niños y niñas son los ciudadanos del futuro”. “Vivimos en una sociedad totalmente adultocentrista, pero es muy importante dedicar tiempo y esfuerzos a la infancia y a la juventud”, ha añadido.

La profesora de UIC Barcelona ha insistido en que tener estos espacios informativos permite a niños y niñas tener herramientas para entender la sociedad que les rodea y que puedan construirse como “ciudadanos críticos y competentes, para hacer una sociedad más justa y ejercer sus derechos”.