La Cátedra WeCare de UIC Barcelona reunió a expertos de ámbito internacional en el encuentro realizado el pasado 24 de febrero con el objetivo principal de reflexionar sobre la etapa final de la vida, la importancia de tratar de forma multidimensional a los pacientes y a sus familias y el papel fundamental de los cuidados paliativos para reducir el sufrimiento intenso de estos.
El Dr. Eduardo Bruera, jefe de Cuidados Paliativos del MD Anderson Cancer Center (Houston) y profesor y F. T. McGraw Chair en el tratamiento del cáncer en la Universidad de Texas (EE. UU.), fue el encargado de inaugurar la sesión, en la que participaron más de 1.000 personas. El reconocido médico paliatólogo destacó la importancia de “cambiar las estructuras y los procesos de los centros y entidades sanitarias para fomentar la creación de unidades de cuidados paliativos donde profesionales especializados puedan atender y acompañar a los pacientes y sus familias”. “Las facultades de Medicina también tienen un papel relevante ya que en su mano está formar a los futuros médicos en los cuidados paliativos y así dar mayor visibilidad a esta especialidad que es tan desconocida por la sociedad y a la vez tan necesaria”, añadió el Dr. Bruera.
En este sentido, la Dra. Cristina Monforte, codirectora de la Cátedra WeCare, incidió en la necesidad de evaluar de forma proactiva el posible deseo de adelantar la muerte que puede darse en algunos pacientes, aunque ellos no lo expresen. Solo así se logrará entender y hacer emerger posibles áreas de sufrimiento que, de otra manera, no se detectarían. “Este conocimiento es fundamental ya que, como muestran los numerosos estudios realizados desde la Cátedra, el mayor temor de los pacientes con enfermedades avanzadas o en la etapa final de la vida es el sufrimiento. “Es fundamental evaluar el deseo de adelantar la muerte y el sufrimiento para poder diseñar planes terapéuticos individualizados y así paliar ese sufrimiento en el paciente y su familia”, explicó la Dra. Monforte.
A lo largo de la sesión, también se destacó la importancia de establecer una relación cercana y fluida entre paciente, familia y equipo médico, con el objetivo de poder definir una planificación anticipada de la toma de decisiones. “Poder decidir con antelación qué tipo de tratamientos quiere recibir el paciente cuando la enfermedad avance, comunicar sus deseos y preocupaciones, aporta una mayor tranquilidad y control al paciente y le permite afrontar mejor su presente y futuro”, explicó el Dr. Christian Villavicencio, director médico de Caredoctors y profesor de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud de UIC Barcelona. Otros aspectos que se abordaron durante el seminario fueron “la necesidad de potenciar los cuidados paliativos avanzados para los casos complejos en los que la persona expresa el deseo de adelantar su muerte, o de la sedación paliativa para no prolongar artificialmente la vida de personas cuando los síntomas o el sufrimiento de su enfermedad no responden a tratamientos”, como mostró el Dr. Jaime Boceta, médico de Cuidados Paliativos, presidente del Comité de Ética de Sevilla Sur y vocal de la Sociedad Española del Dolor.
Por último, el Dr. Rogelio Altisent fue el encargado de analizar la proposición de ley orgánica de regulación de la eutanasia desde la perspectiva que recoge el informe realizado por el Comité de Bioética de España, del que es vicepresidente, y centró las reflexiones en los aspectos éticos de la propuesta de ley. Entre otros aspectos, reflexionó sobre la importancia que tiene que una sociedad decida su modelo antropológico. “Existen dos modelos diferentes ante los que no cabe una posición neutral: el que defiende la vida y la protege como bien primario ya que permite la realización humana en todos los ámbitos, o el que protege el ejercicio de la autonomía del individuo sin ningún tipo de límites”, señaló el Dr. Altisent.
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