El acto empezó con unas palabras de Pere Vall, director de la ESARQ; Marta Benages, subdirectora de alumnado de la ESARQ, y Carlos Pereda, Premio de Arquitectura Española 2013 y jurado invitado, que asistió a todas las presentaciones de los alumnos durante su exposición en la sala oval del Museu Nacional d’Art de Catalunya. Todos ellos hicieron hincapié en el alto nivel de los proyectos de la promoción y en la muestra de compañerismo entre los graduados tras once meses de intenso trabajo. Jaime Llull, estudiante representante de la promoción, dedicó unas emotivas palabras a sus compañeros, profesores y a las respectivas familias, que tanto les han ayudado durante sus años de estudio. Posteriormente se realizó la entrega de diplomas y, por último, graduados, familias, profesorado y personal de la ESARQ lo celebraron conjuntamente en el jardín de la Escuela con un pica-pica.
Pere Vall inició el acto de graduación felicitando a todos los alumnos y dando la enhorabuena a los profesores responsables del Trabajo de Fin de Grado (TFG) de este curso 2013-2014 por su inmensa implicación e impecable trabajo durante todo el curso, y a las familias de todos los alumnos, que con su esfuerzo y apoyo han colaborado en esta gran labor realizada por los estudiantes.
Marta Benages habló sobre el cambio de etapa tan importante que los recién graduados se disponen a empezar y deseó que lo hicieran con los valores que han demostrado durante todo el curso: solidaridad y compromiso, valores que deben recordar y mantener también a lo largo de sus futuras carreras profesionales. Remarcó el envidiable ambiente de trabajo y compañerismo que se ha respirado en la escuela durante todo el curso, y que es tan importante, especialmente en una escuela de arquitectura, donde, a veces, el individualismo puede eclipsar el valor del trabajo colectivo. Terminó con las palabras confianza, respeto y entusiasmo, y deseó que las llevaran siempre con ellos durante el ejercicio de su profesión.
Miquel Lacasta, en representación de los profesores responsables de los talleres TFG, felicitó a los alumnos por el resultado y manifestó su gran satisfacción. También presentó al padrino de promoción, Carlos Pereda, a quien agradeció la “sucesión de instantes” dedicados durante los días de las presentaciones.
Carlos Pereda habló sobre la intensidad y calidad de los trabajos presentados por los nuevos arquitectos. Les recomendó concentrarse siempre en la siguiente zancada y remarcó que el futuro está en las ideas, siendo la arquitectura una disciplina que se mueve entre la invención y la memoria. También habló de la importancia de la medida como condición necesaria para hacer arquitectura y que hay que hacer “de lo pequeño algo grande”. Habló de la indudable “dureza de la profesión del arquitecto”, con la que seguro se encontrarán los recién graduados, pero también dijo que “si hay posibilidad de ser optimista por qué estropearlo. La vida es ir siempre hacia delante, y eso solo se hace con optimismo”.
