¿Puedes contarnos un poco sobre ti? 

Soy María Carcaboso Abrié, tengo 21 años y estoy en cuarto de Periodismo en UIC Barcelona. Ahora mismo soy redactora en la sección de Sociedad de la delegación de la Agencia EFE en Cataluña, gracias a una beca de la Agencia y la Fundación “la Caixa” con la que empecé en noviembre. Estuve viviendo en Poznan (Polonia) durante seis meses el año pasado con una beca Erasmus. Justo volví tres días antes de que empezase la guerra entre Rusia y Ucrania. Viajar y conocer realidades distintas a la mía es lo que más me gusta, y tengo la suerte de dedicarme a algo que me permite tanto vivirlo como contarlo. 

¿Qué experiencias laborales previas a la beca de EFE/Fundación “la Caixa” tienes? 

Todas mis experiencias laborales han sido a través de contratos de prácticas. Durante el verano de 2021, al terminar segundo, estuve en Lavinia como redactora de Informativos Telecinco. No pude vivir la experiencia plenamente porque, debido a la Covid, trabajé telemáticamente, pero fue mi primer contacto con la profesión y me ilusionó muchísimo. Más tarde, en marzo de 2022, entré en la agencia Globe Comunicación y estuve hasta finales de junio. Cuando empecé a estudiar no contemplaba dedicarme a esta rama de la comunicación, pero la verdad es que encajé y me gustó, aunque también fueron prácticas telemáticas. Trabajar desde casa es cómodo en ocasiones, pero a mí ya me empezaba a resultar un poco frustrante no haber pisado una redacción o una oficina en ninguna de mis dos experiencias de prácticas. 

¿Qué hiciste entonces? 

Llegó el verano de 2022 y pude enlazar las prácticas en la agencia de comunicación con otras en Grupo Godó. Allí me dediqué al Branded Content, es decir, producía contenidos de marca que se publicaban en soportes del Grupo. En concreto, hice branded en La Vanguardia, Magazine La Vanguardia y RAC1. Empecé estas prácticas con muchísimas ganas —supongo que por entrar en un grupo grande—, pero me di cuenta de que no era lo que verdaderamente quería. Terminé en Grupo Godó a principios de agosto, me tomé unas semanas de vacaciones y el día 1 de septiembre se abrió el plazo para presentar candidaturas a la beca de Agencia EFE y Fundación “la Caixa”. 

¿Cómo te sentiste cuando supiste que habías sido seleccionada? 

Antes de saberlo, recuerdo que todo el mundo me decía que si no me cogían no pasaba nada, que ya era un logro haber llegado hasta la última fase, pero nada me tranquilizaba, yo quería la beca. Empecé a leer la relación oficial de becarios y los segundos que pasaron hasta que vi mi nombre —que igual fueron tres—, se me hicieron eternos. Cuando vi mi nombre sentí alivio. Un alivio que duró pocas horas porque luego me empecé a preocupar por si daría la talla. Quería —y quiero— hacerlo bien. Me costó unos días asimilar que había llegado el momento de empezar la etapa que llevaba en mi punto de mira desde antes de empezar Periodismo, pero más me costaba creer que todos los nervios y el estrés que había pasado durante las pruebas quedaban atrás.

¿Cómo está siendo tu experiencia como becaria de EFE/La Caixa? 

Al principio me abrumó un poco la situación porque sentía una responsabilidad enorme. De hecho, la sigo sintiendo, pero reconozco que he aprendido a canalizar la presión que yo misma me pongo. Me han dado una oportunidad enorme que valoro muchísimo y estoy muy, pero que muy agradecida. Como decía, estoy en Sociedad, donde hay redactores especializados en ámbitos más concretos dentro de la misma sección —educación, salud, feminismo…—. Yo toco un poco de todo. 

¿Cuál ha sido de momento el mayor aprendizaje? 

A nivel profesional, es evidente que en una agencia de noticias de las características de EFE te nutres muchísimo de todo lo que saben sus periodistas, porque son profesionales excepcionales que te aportan muchísimo. Pero resaltaría que he tenido la suerte de estar en una sección donde tanto los redactores como quien la encabeza han estado dispuestos a ayudarme desde el primer momento para que mi trabajo, igual que el suyo, también pueda llegar a brillar. Me atrevería a decir que es ahora cuando realmente me estoy convirtiendo en periodista porque estoy aprendiendo el oficio a pasos agigantados. 

¿Qué te ha aportado más allá de lo profesional? 

Desde que decidí que optaría a esta beca hasta que la conseguí, he visto en las personas que me rodean generosidad, bondad, altruismo… Becarios de otros años que ya hace tiempo que terminaron en EFE han estado para ayudar a otros a conseguir lo que ellos tuvieron en su momento. Mis compañeros de clase han sido los primeros en alegrarse cuando les decía que, poco a poco, iba superando fases. Amigos me han recordado la importancia de los pequeños logros cuando mi autoconfianza flaqueaba. Y mi familia ha vivido igual de intensamente que yo tanto los nervios como las alegrías. 

¿Por qué decidiste estudiar Periodismo? 

El porqué de la decisión dista bastante de por qué estudio Periodismo. Empecé porque quería trabajar en el Telediario, a poder ser en la sección de deportes, pero, desde los 17 hasta los 21 he tenido mucho tiempo para madurar ideas… Tengo curiosidad permanente por conocer, y me encanta estar al día de todo. Además, el Periodismo te permite probar y hacer muchas cosas y distintas entre sí. La María que entró en UIC Barcelona queriendo hacer actualidad sobre deportes no está reñida con la María que ha probado el mundo de las agencias o con la María que quizá, de aquí a unos años, termine en comunicación corporativa. 

¿Qué retos actuales crees que afronta el periodismo? 

Yo creo que la desinformación es el mayor reto ahora mismo. Siempre ha sido crucial contrastar fuentes y verificar información, pero en la era de la inmediatez lo es más que nunca. Por suerte, se están impulsando proyectos de verificación muy interesantes que luchan contra las fake news y que desempeñan una labor maravillosa: Maldita, EFEverifica, IVERES, VerificaRTVE, Newtral o Verificat.

¿Cómo te han preparado en Periodismo de UIC Barcelona? 

Que desde que entramos a la Universidad ya tengamos un medio digital como Doblecheck para iniciarnos y podamos tocar cámaras de televisión y pisar un plató y un estudio de radio ya marca la diferencia. Sin duda, es una muy buena oportunidad, pero también reconozco que tienes que saber exprimirla. Y más allá de las asignaturas, yo destacaría la cantidad de profesores en activo de la Universidad que están dispuestos a asesorarte y a ayudarte y que, para mí, han sido guías maravillosos. También destacaría que UIC Barcelona permita hacer prácticas casi desde el principio. Es algo que nos ayuda a aprender de la profesión a niveles más prácticos, pero también a saber dónde encajamos y qué se nos da bien, así como a establecer relaciones con compañeros de profesión que pueden resultar muy útiles.

¿Qué te gustaría hacer en el futuro? 

En el futuro próximo, trabajar fuera. Y tengo la suerte de que sea ya algo seguro gracias a la beca en EFE, que tiene una duración de 18 meses y los nueve primeros los haces en una delegación nacional, mientras que los nueve siguientes son en una delegación internacional. No sé dónde acabaré, porque todavía no sabemos en qué países ofertarán plazas, pero no me quiero perder por nada del mundo ser corresponsal. Para un futuro más lejano no descarto opciones porque me gustan muchas ramas distintas dentro de la Comunicación, algo que considero que es una gran suerte.