El pasado lunes 17 de mayo, UIC Barcelona ofreció una sesión virtual dirigida al personal docente e investigador de plantilla de la Universidad, que tenía como objetivo reflexionar sobre el sexenio en la investigación y su importancia estratégica para impulsar una carrera investigadora, tanto individualmente como en grupo.

Bajo el título “El papel del sexenio en la investigación”, el Vicerrectorado de Planificación y Calidad de UIC Barcelona invitó a Martí Casadesús, catedrático de la Universidad de Girona y director de AQU Cataluña, y Javier Llorens, catedrático de la Universidad de Granada y coordinador de evaluación de sexenios de ANECA, los cuales participaron como ponentes de la mesa redonda e informaron al PDI de la Universidad sobre el papel del sexenio como elemento estratégico de la Universidad.

Tanto la Agencia para la Calidad del Sistema Universitario de Cataluña (AQU Cataluña), como la Agencia Nacional de Evaluación de Calidad y Acreditación (ANECA), son organismos que tienen como objetivo la evaluación, la acreditación y la certificación de la calidad en el ámbito de las universidades y centros de enseñanza superior. AQU Cataluña, por su parte, tiene como foco principal las titulaciones, el profesorado, los centros y servicios universitarios de Cataluña, mientras que ANECA es un organismo autónomo adscrito al Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades focalizado en todo el Estado español.

La sesión virtual giró en torno a los sexenios, un tramo de investigación que reconoce al profesorado universitario por los méritos de su actividad investigadora. Se denomina sexenio porque los solicitantes tienen que someter a evaluación una selección de los trabajos científicos publicados durante un periodo de seis años.

En este sentido, el objetivo que tienen los sexenios en el ámbito universitario y en la carrera profesional de un investigador es fomentar el trabajo de investigación de los docentes de las universidades de todo el Estado español.

En sus intervenciones, Martí Casadesús y Javier Llorens explicaron los criterios de evaluación para obtener un sexenio y reflexionaron sobre la importancia de la investigación como principal motor de conocimiento y transferencia de las universidades catalanas y españolas. Ambos remarcaron que la solicitud de un tramo de investigación es voluntaria y, según Llorens, “el número de sexenios es una medida de prestigio académico”. Así mismo, “el hecho de tener al menos un sexenio es un requisito para poder dirigir tesis doctorales, figurar como investigador principal en proyectos de investigación o formar parte como miembro en tribunales de selección de profesorado” confirmó el coordinador de evaluación de sexenios de ANECA.

Los dos ponentes coincidieron al afirmar que el sexenio, y en particular la cantidad de sexenios otorgados a los profesores de una universidad, es un indicador para medir hasta qué punto la investigación es estratégica para la universidad y, consecuentemente, para posicionarla.