17/09/2024

La profesora Maria Fitó explora la estética del blanco y negro en el cine contemporáneo

En un artículo publicado en The Conversation “¿Por qué rodar en blanco y negro en un mundo a color”, la profesora Maria Fitó, conjuntamente con el profesor de la Universidad Abat Oliba Alfonso Freire, reflexiona sobre el uso del blanco y negro en el cine del siglo XXI

Fitó ofrece un análisis de las razones estéticas y narrativas en el uso de esta técnica en pleno siglo XXI

En un mundo audiovisual donde las producciones en color se han convertido en el estándar cinematográfico, Fitó analiza cómo el blanco y negro aporta un valor añadido más allá de la nostalgia o la evocación del pasado. “El blanco y negro no suele ser un simple recurso estético con el que crear textura, contrastes de luz y sombra o formas, sino que crea atmósferas únicas que pueden resonar con más profundidad en el espectador”, comenta Fitó.

La autora nombra algunos cineastas, como Andrei Tarkovski, que fueron defensores del blanco y negro, lo consideraban una herramienta que les permitía transmitir de manera más clara y directa la esencia psicológica de sus obras. Del mismo modo, Fitó cita películas como Mank (2020), dirigida por David Fincher, filmada en blanco y negro como homenaje a la estética de Hollywood de los años 30 y 40. En este caso, el blanco y negro es una decisión conceptual que ayuda a reforzar el ambiente histórico y dar verosimilitud a la historia.

Pese a que el blanco y negro atrae a un público nicho y genera menores audiencias que las producciones en color, Fitó sostiene que este recurso cinematográfico ofrece una experiencia estética y emocional diferente que enriquece la narrativa.

El artículo de la profesora de la Facultad de Ciencias de la Comunicación Maria Fitó destaca la vigencia y la relevancia de este estilo cinematográfico e invita a reflexionar sobre la complejidad de lo aparentemente sencillo en el arte audiovisual.