27/06/2014

Expertos aportan en la UIC soluciones en favor de la justicia alimentaria

Alumnos de diversas titulaciones de la UIC, así como profesores y expertos invitados, participaron activamente el pasado jueves 14 de noviembre en la V Jornada de Sostenibilidad de la Universidad, que este año reflexionaba desde una vertiente interdisciplinaria sobre el tema propuesto por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) para el Día Mundial de la Alimentación 2013: «Sistemas alimentarios sostenibles para la seguridad alimentaria y la nutrición».

La Jornada, impulsada por el Departamento UIC+Sostenible, acogió diversas mesas redondas, conferencias y talleres para reflexionar, con la aportación de expertos de diferentes ámbitos, sobre cuestiones como la huella ecológica alimentaria, el desperdicio alimentario, la desnutrición en el mundo y la justicia alimentaria.

PROPUESTAS DE ALIMENTACIÓN SOSTENIBLE

Los alumnos presentaron propuestas de alimentación sostenible mediante proyectos de investigación que se han expuesto en el campus de la Universidad.

En la modalidad póster ha destacado la propuesta “Aliments last call”, que recogía los resultados de una investigación realizada en diez supermercados de renombre de España que estudió qué medidas aplican para evitar desechar alimentos cuando están a punto de caducar.

En cuanto a talleres, alumnado de 3.º de Enfermería y Medicina replicó el proyecto de educación nutricional que ellos mismos habían llevado a cabo en el campo de trabajo realizado el pasado verano en Guatemala, impulsado por Universitarios Solidarios de la UIC.

Asimismo, alumnado de 3.º del Grado en Educación Primaria presentó un taller que resultó ganador como ejemplo de alimentación sostenible. En él mostraban cómo generar alimentos igualmente sabrosos con productos que ya no tienen buena presencia o que están a punto de caducar.

Gonzalo Fanjul, economista, activista e investigador, realizó la primera intervención, con una conferencia en la que presentó datos de la FAO sobre la situación de desnutrición grave, que todavía en 2013 padecen 842 millones de habitantes, analizando sus causas y las posibles soluciones. Fanjul puso de relieve la paradoja de que en un mismo planeta hay personas que enferman por sobrepeso, mientras que otras se mueren de hambre, hecho que, comentó, invita a estar más informado y a ser más responsable respecto al propio consumo de alimentos.

A continuación tuvo lugar una mesa redonda interdisciplinaria sobre alimentación sostenible y solidaridad, en la que intervinieron la Dra. Silvia Bañares, experta en derecho alimentario; el Dr. José Juan Rodríguez, experto en salud y alimentación, y Raúl Lozano, experto en empresa alimentaria, y que fue moderada por la Dra. Dolors Navarro-Rubio, profesora responsable del Área de Epidemiología y Salud Pública de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud de la UIC.

A lo largo de las sesiones se reflexionó de manera transversal, con la participación de estudiantes, profesores y personal de administración y servicios, sobre las relaciones que hay entre el derroche de alimentos y la justicia social.

“Tener un consumo responsable de los alimentos, disminuyendo la propia huella ecológica alimentaria, contribuye a preservar los recursos naturales del planeta, cada vez más limitados”, comentó Silvia Albareda, directora de Sostenibilidad de la UIC, quien apuntó también que “la universidad debe ayudar a desarrollar las competencias que hacen que las personas sean más sostenibles; estas competencias pasan por la información, la ética y el cambio de conductas”.

La Jornada, de carácter transversal, contó por la tarde con una metodología de círculos de calidad, en la que de forma dinámica un grupo de alumnos y profesores reflexionaron y presentaron propuestas factibles sobre alimentación y ahorro. Este taller interdisciplinario fue dinamizado por el profesor Salvador Vidal, de la Facultad de Educación, y Antoni París, experto en comunicación y gestión del conocimiento en temas medioambientales.

El acto se cerró con una merienda sostenible, en la que participó toda la comunidad universitaria, y que fue un claro ejemplo de cómo llevar a la práctica las reflexiones recogidas a lo largo de todo el taller transversal.